Nunca entendí las furiosas críticas al Carnival Is Forever
de Decapitated. No digo que sea un disco intocable (aunque debería), sino
aquellas que no entendían el contexto de por qué había surgido dicho álbum y
dicho cambio. Sobrevivir a un trágico accidente de tráfico que te deja sin tu
joven prodigio a las baquetas y a tu cantante comiendo sopa en casa, no es
fácil, de hecho la gran mayoría de bandas habrían dado carpetazo al grupo,
perfectamente entendible por el golpe sufrido.